Es una opción viable dudar de la capacidad de reacción del gobierno español en el momento de la imposición del Estado de Alarma. No obstante, por detrás de lo que aparentemente se ve, existe una gran operativa compleja basada en la toma de decisiones conscientes y ponderadas sobre los diferentes indicadores que pueden comprometer el afianzamiento de la institución.
La coalición política de los partidos que forman el gobierno con una mayoría simple lleva a que la cúpula esté bajo la mirada de lince de la oposición y que cualquier acción menos acertada o novedosa, independientemente de que esté justificada o no, sea blanco de crítica.
Lo que está pasando en España demuestra la problemática real que existe en un Estado dividido en 17 comunidades autónomas donde cada una tiene ciertas potestades en los temas que afectan a la población, mientras que otras son autoridad absoluta del gobierno.
El tema sanitario comparte competencias entre la Administración del Estado y las Comunidades Autónomas y eso conllevó a situaciones de discrepancia entre los varios presidentes de las autonomías y el gobierno central; uno de los principales problemas a los que estamos asistiendo es el tema logístico en la compra de material sanitario para dotar de protección a los profesionales de la salud, así como los test rápidos que a unas comunidades autónomas parecen llegar y a otras no. Además, se emplean distintas metodologías de actuación en cada comunidad para identificar la enfermedad.
Son varios los conflictos que venimos asistiendo desde que el estado de alarma fue accionado. Ejemplo de ello es lo que está ocurriendo con la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Ayuso, que reclama al gobierno más apoyo en la compra de material, cuando según el gobierno inicialmente no quisieron ayuda, teniendo en cuenta que la compra de material es una de las potestades de las comunidades autónomas.
Referente a Quim Torra hubo en enfrentamiento de mando con Pedro Sánchez, de igual modo que hubo con el presidente de Murcia, Fernando López, por sus intenciones de cerrar las fronteras y confinamiento de Cataluña y de la paralización de obras no esenciales, medidas que fueron desautorizadas por el gobierno.
Gobernantes del mismo partido político no comparten posicionamientos políticos y mientras que unos apoyan las medidas del gobierno, otros demuestran su descontentamiento reivindicando una comisión parlamentaria común para decidir entre todos los partidos el futuro del país.
Pablo Casado, se muestra contrario a las últimas medidas de la cúpula que afectan primordialmente a las empresas y también a los índices de paro. Asimismo, pide explicaciones al gobierno sobre la compra fraudulenta de los test para el coronavirus e insiste en conocer el nombre del proveedor chino que por ahora el gobierno sigue sin indicar.
Otros políticos como José Monago, presidente del PP en Extremadura, considera que las cifras reales de infectados y fallecidos en esta región están siendo ocultados por intereses políticos.
El Partido Popular está destacándose de forma muy activa contra todas las políticas aplicadas por el gobierno; el secretario general, Teodoro García, cree necesario que el gobierno reconozca públicamente sus errores y que las decisiones tomadas sean firmes y pensadas. Asimismo, se posiciona a favor de que mientras no se reanude la actividad económica que no se pague impuestos.
Por otro lado, Santiago Abascal, considera insuficientes las ayudas económicas gubernamentales y cree que es el gobierno quien debe asumir los tres meses de sueldo de todos los empleados afectados. A parte de reclamar la dimisión de Sánchez.
También el PNV se mostró contrario al parón general de las empresas consideradas no esenciales por la falta de transparencia al no debatir con los otros representantes políticos los pros y contras de esta decisión y cuales deben ser estas empresas.
Otros partidos como la CUP quieren que se procesa a la contratación de personal médico proveniente de Cuba para evitar situaciones límite de falta de profesionales como está pasando en Igualada.
Los líderes de la oposición, entre ellos Inés Arrimadas, convergen en que Sánchez debe ser claro en todas las decisiones que se tomen para no generar incertidumbre en los ciudadanos.
LAS ORGANIZACIONES INTERNACIONALES
El director general de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de China, George Gao, que ocupa el cargo análogo que Fernando Simón en España, comenta su desacuerdo en muchas medidas que se están aplicando y recomendando, insistiendo en la necesidad de que todos los ciudadanos lleven mascarillas, contrariamente a lo recomendado por la OMS.
Con relación a la Unión Europea, también se asistió a opiniones dispares entre los líderes europeos como pasó con los Países Bajos o Alemania que se posicionaron en contra apoyar económicamente a España e Italia, insistiendo en que la mejor solución sería un rescate como pasó en la crisis de 2008. En contrapartida países como Portugal salieron en defensa de España, junto a Italia y Francia.
Sánchez por ahora lo que logró con la Unión Europea es que se adelantaran los 11000 millones de euros de fondos estructurales predestinados para España en 2020 antes de la crisis de esta pandemia.
PLAN DE ACTUACIÓN EN SITUACIÓN DE CRISIS
Todas las organizaciones deben tener un protocolo de actuación para permitir identificar potenciales riesgos tanto internos como externos que pueden afectar la estructura de la empresa, su reputación y buen gobierno. Es decir, la prevención tiene que existir para mitigar y poder controlar los riesgos en caso de que estos no puedan ser anticipados o evitados.
Tener un comité de crisis es imprescindible en cualquier organización, sea esta particular o pública, pero a parte de eso hay que tener preestablecidos diferentes tipos de análisis actualizados y elaborados por distintos expertos como puede ser un DAFO.
Además, es clave conocer la opinión pública y de la competencia y actuar de forma rápida y efectiva contra cualquier hecho que pueda comprometer el mando directivo y cualquier situación que pueda provocar un impacto negativo en la organización.
Es imprescindible contar con un buen porta voz que sepa transmitir el mensaje de forma clara, concisa y honesta, y que demuestre la capacidad de ponerse en la situación de quien le escucha Asimismo este representante debe saber disculparse en nombre de la organización siempre que la situación lo requiera.
Un Estado es la institución más importante que existe y desempeña distintos roles y funciones que permiten la cohesión estructural y la harmonía de los distintos puestos. Por eso a priori ya hay que disponer de un plan de actuación, un sistema de normas y valores comunes e ideologías políticas que justifiquen y legitimen determinado poder.
La base de la democracia es la participación conjunta de la opinión de todos los ciudadanos mediante el sufragio pasivo y por los representantes políticos elegidos por el pueblo. Por este motivo un gobierno debe ser honesto y transparente, informando a todos sus ciudadanos de los cambios que puedan perjudicar a su bien estar. De ahí que todas las políticas públicas decididas y aplicadas para solucionar problemas de cualquier índole en la sociedad deben de ser informadas, y en caso de ser necesario deben de ser contrastadas y discutidas no solo por el gobierno como por todos los partidos que componen el parlamento.
Un análisis detallado llevado a cabo por el equipo ejecutivo, después de una evaluación extensa realizado por los expertos más cualificados analogía con la plasmación de los resultados estadísticos previamente debatidos en conjunto es el primer paso para la aplicación de una política pública exitosa.
En situaciones de extrema urgencia el gobierno tiene el derecho de actuar de forma rápida y unilateral. No obstante, siempre que posible debe formular sus líneas de acción a la oposición y escuchar sus aportaciones. Aunque la toma de decisiones que resulte de esa exposición de argumentos y teorías sí que será realizada por el gobierno elegido por los ciudadanos.
Para que una decisión prospere debe surgir de un buen líder que aplique la razón en sus decisiones, escuchando a todas las partes, barajando todas las opciones y apoyándose en un equipo técnico y especializado que caminen en una misma dirección que es la de los intereses comunes de toda la población.
El liderazgo, es un concepto necesario e imprescindible para la estructura de una sociedad.
Los líderes tienen la capacidad de transmitir esperanza, motivar a otros que necesitan directrices para seguir adelante; deben ser ellos mismos, no imitar a nadie, y no deben querer cambiar lo que ya funciona.
Uno de los principales valores para ser un buen líder es tener humildad, empezar de abajo e ir construyendo, teniendo como base la consistencia y resistencia.
En momentos de estrés, crisis o una situación de emergencia sanitaria grave como es el caso, el trabajo en equipo debe prevalecer ante cualquier ideología política, creencias, raza o religión. Las diferencias deben desvanecerse y las necesidades e intereses primarios tienen que imponerse para que se alcance el objetivo común.
Por Virgília Pires Analista Oficial de Inteligencia, Liderazgo y Diplomacia